Cuando pensamos en Broadway, solemos imaginarnos luces resplandecientes, representaciones dramáticas y canciones emblemáticas. En las últimas décadas, Disney, conocido por sus cuentos de hadas y sus películas de animación, ha entrado en escena y ha revolucionado nuestra forma de entender el teatro en vivo. Dos producciones en particular, El Rey León y Aladdín, se han convertido en verdaderos clásicos de Broadway.
El Rey León se estrenó en Broadway en 1997 y fue una de las primeras incursiones de Disney en el teatro en vivo, tras La Bella y la Bestia y El Rey David. Cuando El Rey León llegó por primera vez al escenario de Broadway, nadie podía predecir el éxito que cosecharía esta producción teatral. La adaptación de la entrañable película de animación en una maravilla visual se convirtió rápidamente en una producción imprescindible y se ha mantenido como uno de los espectáculos más taquilleros de Broadway durante más de dos décadas.
Dirigida por Julie Taymor, la obra es un espectáculo de marionetas, máscaras y juegos de sombras, que se unen para crear una asombrosa representación de la sabana africana y sus habitantes. La historia se mantiene fiel a la de la película original, pero se presenta de tal manera que resulta totalmente nueva y fresca. Esto se debe en gran parte al uso innovador de marionetas y máscaras, que permiten una mezcla única de los intérpretes humanos con sus protagonistas animales.
La banda sonora de El Rey León, creada por Elton John y Tim Rice, es parte integrante de su éxito. Canciones icónicas como "Circle of Life" y "Hakuna Matata" se yuxtaponen a nuevas composiciones creadas específicamente para el escenario. Desde la imponente presencia de Mufasa hasta las juguetonas travesuras de Timón y Pumba, los actores dan vida a sus personajes de una forma que es a la vez fiel a la película original y refrescantemente original.
Una parte importante del éxito de El Rey León es su escenografía única. Los decorados, diseñados por Richard Hudson, evocan las vastas extensiones de la sabana africana, el inquietante cementerio de elefantes y la exuberante jungla. Las marionetas y máscaras, diseñadas por la directora Julie Taymor y Michael Curry, son una forma de arte en sí mismas. Desde las imponentes jirafas hasta las diminutas suricatas, cada criatura cobra vida con un realismo y una creatividad asombrosos. El vestuario, también diseñado por Taymor, mezcla los elementos humanos y animales de los personajes, creando un mundo vivo y fantástico.
El Rey León ha recibido numerosos galardones que avalan su excelencia narrativa, musical y escénica. En 1998 ganó seis premios Tony, entre ellos los de mejor musical, mejor escenografía y mejor vestuario. Además, Julie Taymor se convirtió en la primera mujer en ganar el Tony® a la mejor dirección de un musical. Asimismo, El Rey León ganó un Grammy al Mejor Álbum de Espectáculo Musical.
El Rey León no sólo ha sido un éxito comercial, sino que también ha remodelado las expectativas de lo que puede ser un espectáculo de Broadway. Su innovador uso de las marionetas, las máscaras y la escenografía ha ampliado los límites del teatro en vivo, inspirando a muchas otras producciones a explorar nuevas posibilidades creativas.
El 26 de febrero de 2014 se estrenó Aladdín, de Disney, en una alfombra mágica hacia Broadway. Este musical, basado en la película de animación de 1992, se convirtió rápidamente en un éxito de Broadway. Aladdín sigue la historia de un "diamante en bruto" callejero que, con la ayuda de una lámpara mágica y un Genio que parlotea rápido, intenta ganarse el corazón de la princesa Jazmín mientras frustra los malvados planes del Gran Visir, Jafar.
La dirección y la coreografía de Casey Nicholaw garantizan que Aladdín sea un espectáculo enérgico y trepidante de principio a fin. El guión también está lleno de humor e ingenio, aportando un aire contemporáneo a este cuento atemporal. Además, la incorporación de nuevos personajes y canciones al escenario hace que la historia brille de nuevo. Por ejemplo, los tres amigos de Aladdín, Babkak, Omar y Kassim, que se escribieron originalmente para la película pero no se incluyeron en la versión final, proporcionan alivio cómico y apoyo a Aladdín en su viaje.
La banda sonora de Aladdín es obra de Alan Menken, con letra de Howard Ashman, Tim Rice y Chad Beguelin. La producción de Broadway incluye conocidas canciones favoritas de la película, como "A Whole New World" y "Friend Like Me", además de otras nuevas, como "Proud of Your Boy" y "A Million Miles Away", que añaden profundidad a los personajes y a la trama. Interpretadas en directo, estas canciones cobran aún más fuerza.
Las interpretaciones de Aladdín son espectaculares. Los actores encarnan a sus personajes con sinceridad y extravagancia, haciéndolos a la vez cercanos y más grandes que la vida. Genio, al que originalmente puso voz Robin Williams en la película, es especialmente digno de mención, robándose todas las escenas en las que aparece.
La escenografía de Aladdín, de Bob Crowley, es un despliegue de colores y detalles intrincados, que crean el mercado de Agrabah, el opulento palacio y la misteriosa Cueva de las Maravillas. El vestuario, diseñado por Gregg Barnes, es igualmente impresionante, con una gama de estilos que van desde la ropa de calle hasta los atuendos reales, todos ellos minuciosamente detallados y ricamente coloreados. Con la impresionante cifra de 337 trajes, todos los personajes están vestidos de forma distintiva. La minuciosidad de los detalles, la riqueza de colores y la diversidad de estilos de estos vestuarios ponen de manifiesto el extraordinario trabajo artesanal que supone la creación de un espectáculo de Broadway.
Desde su estreno en Broadway, Aladdín ha sido aclamado por la crítica y ha recibido numerosos premios por su excelencia teatral. Fue nominada al prestigioso premio Tony® en cinco categorías, así como al Drama Desk Award e incluso a un Grammy.
La incursión de Disney en Broadway ha redefinido el entretenimiento familiar en directo. Antes de la llegada de Disney, Broadway no solía considerarse un destino para ir en familia. Sin embargo, con espectáculos como El Rey León y Aladdín, Disney ha creado producciones accesibles y agradables para públicos de todas las edades. Estos espectáculos son aptos para toda la familia sin ser por ello simplistas, lo que garantiza que se adaptan no sólo a los niños sino también a los adultos. Perfecto tanto para los aficionados al teatro como para los amantes de Disney, estos espectáculos son una visita obligada.